El costo de la canasta básica alimentaria en la Argentina registró durante mayo un incremento del 4,8%, mientras los productos que integran la canasta básica total avanzaron el 3,2% respecto de abril, según informó ayer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
De esta forma, una familia tipo -compuesta por dos personas adultas y dos niños- necesitó en mayo percibir ingresos por $ 18.833,55 para poder abonar los bienes y servicios que integran la canasta básica total, y de esta manera no caer por debajo de la línea de pobreza. En el caso de la canasta básica alimentaria, ese mismo grupo familiar requirió un ingreso mensual de $ 7.473 para no caer por debajo de la línea de indigencia.
En alza
En base a estos guarismos elaborados por el Indec, la canasta básica total se incrementó el 3,2% durante mayo y acumuló una suba del 12,9% desde que comenzó el año, y 28,4% en los últimos doce meses. En tanto la canasta básica alimentaria registró un aumento mensual del 4,8%, mientras que en lo que va del año avanzó 12,5% y 24,9% en relación a mayo del año pasado.
La última medición correspondiente al segundo semestre arrojó que el 25,7% de los habitantes eran pobres, y entre ellos 4,6% eran indigentes. Estas cifras estuvieron por debajo de la medición del segundo semestre del 2016, cuando el índice de pobreza fue equivalente del 30,3%, y el nivel de indigencia se ubicó en 6,1%.
El próximo informe sobre pobreza será el correspondiente al primer semestre de este año y se conocerá el 27 de septiembre.
Días atrás, en una entrevista concedida a LA GACETA, el director del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (UCA), Agustín Salvia, aseguró que la pobreza en el país va a profundizarse en los próximos meses. “No sólo habrá pobres cada vez más pobres, sino que muchos sectores de la clase media terminarán cayendo en esa misma situación”, vaticinó.